Yudelsy en Cúpira … Inspiración marina
La brisa no cesa…
Es interminable, al igual que la extensión de la playa, el arrullo del mar y el AZUL del cielo.
Me mimetizo en el horizonte, y soy transportado al ras en formaciones de aves que vienen y van.
Estoy en “Acuarela” (1), pintoresco enclave barloventeño.
La arena es finísima y el sol GRUESO.
La civilización es escasa pero suficiente.
En el camino me topé con Yudelsy; entre catalinas, casabes, naiboa y el dulzor del coco.
Hermosa jovencita, como cacao en flor. Vida que nace en desborde de sonrisas.
Su tez es frutal… morena brillante, con destellos dorados y violeta.
La recuerdo niña en la primera luz del amanecer, y el canto de los pájaros.
La recreo mujer en el rugir del mar, el embate de las olas y el calor de la arena.
Mis pisadas son borradas por la marea, y mis estelas brazadas engullidas por la mar.
Un peñero se bambolea, un tuqueque se aferra a las paredes, un gavilán atiza desde un cocotero, un cangrejo sobrevive al picoteo y extiende sus ojos en señal de alerta. ¿Simbolismo o señales?
Mi soledad se siente acompañada con los fantasmas del pasado y el espíritu de la vida.
gAt
Datos:
(1) Acuarela, Cabañitas aisladas ubicadas entre Cúpira (a 12 km) y Boca de Uchire (a 20 km).
Instalaciones cómodas, con aire acondicionado y servicio de restaurant desde las 8:00 hasta las 8:00.
Atención informal, personalizada y complaciente. (www.cabanasaquarela.com).